Un sujeto asesinó a puñaladas a una perrita pitbull perdida que ingresó en su bicicletería, ubicada en Isidro Casanova, partido de La Matanza.
#LaMatanza – 🐶🪛 Sádico mató con un destornillador a una perrita perdida que entró a su local https://t.co/kPGF78uN4e pic.twitter.com/wSbOIFz8Go
— SM Noticias (@SMnoticias) February 9, 2024
Todo comenzó el pasado miércoles, cuando Canela, una perra de 7 años, escapó de su casa en Washington y Berna. Tras difundir la búsqueda del animal, vecinos de la zona la encontraron en la calle malherida. “Tuvo la mala suerte de ingresar a la biciletería Fénix, que queda a la vuelta, en México y Berna”, señalaron a SM Noticias.
Se cree que dentro del local, un joven de 22 años. identificado como Teodoldo S., hijo del dueño del comercio, le propinó un total de 7 puntazos con un destornillador que la llevó a pelear por su vida durante horas y finalmente fallecer en la tarde del jueves.
“Ese lugar tiene mala fama, el dueño está acusado de envenenar perros de vecinos; lastimar gatos que pasan por la vereda; salir con cadenas y golpear a los perros que se cruzan; y dispararle con un rifle de aire comprimido al perro del vecino porque le molestaba que ladre por las noches. Así miles, pero esta vez fue su hijo el autor de este asesinato”, indicaron a este medio allegados a los dueños de Canela.
Asimismo, revelaron que el sindicado, quien goza de libertad y continúa atendiendo, dio 3 versiones distintas del hecho, y para nada contestes con la realidad. “Primero dijo que la perrita le mató el gato, pero nadie vio ningún gato; después dijo que la perra agarró a un niño y no lo soltaba, pero queda descartado tras ver el video; y su tercera versión fue que quiso atacar a una mujer. Ninguna es válida y nada justifica este ensañamiento”, indicaron las fuentes a este medio.
La familia de Canela ya radicó la denuncia penal, y la recordaron en redes sociales: “Era dócil, buena, juguetona, que vivía con su mamá, papá y hermanos humanos. Dormía en la cama con los niños. Ni tirada como estaba con tanto dolor atacó a desconocidos, todos la pudieron acariciar y tocar. Esto no puede quedar así”.
