Ayelén Benítez Medina, de 14 años, y Vanesa Lachmañuk, de 28, eran buscadas desde hacía 2 semanas en La Matanza. Sus cuerpos aparecieron en las últimas horas en el río, tras haber sido asesinadas a balazos, en lo que se cree, una venganza narco.
Dos mujeres asesinadas y arrojadas al Río Matanza en otra acción más del narcotráfico ♀️
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— SM Noticias (@SMnoticias) September 13, 2024
Las familias las buscaban desde hacía 2 semanas. La Policía llevó adelante distintos tipos de rastrillaje por todo Gregorio de Laferrere y localidades cercanas. Este miércoles, sus cuerpos aparecieron baleados en el río Matanza.
La zona ya había sido rastrillada con resultado negativo, pero según trasciende, la bajante permitió que los cuerpos salgan a superficie. La data de muerte correspondería al mismo día de la desaparición, el 28 de agosto
Para dar con los restos de las mujeres se llevaron a cabo intensos operativos policiales que incluyeron la colaboración de la Prefectura.
A cargo de la instrucción del doble homicidio está el fiscal especializado en homicidios de La Matanza, Carlos Arribas, quien recibió el resultado de las autopsias, las que arrojaron que Lachmañuk fue ultimada de un balazo en la frente, mientras que Benítez Medina fue ultimada de 3 disparos en el cráneo.
Ambas mujeres habían sido vistas por últimas vez en la noche del 28 de agosto en cercanías a la plaza ubicada frente a la calle Echeverría al 7100. El 30 de agosto, 2 días después, la madre de Vanesa había encontrado un par de zapatillas Nike rojas que le pertenecían a su hija en un campo situado en proximidad entre el rio Matanza y el Barrio Lujan.
En sucesivos rastrillajes se encontraron un corpiño de color bordó y un par de zapatillas del mismo color, de características compatibles a las utilizadas por Benítez Medina.
Por declaraciones de las madres, las mujeres tenían problemas de adicciones, y se cree que podrían tener conflictos con personas dedicadas a la venta de estupefacientes en la zona, razón por la cual se realizaron varios procedimientos en los que la Policía fue agredida a tiros, resultando los oficiales ilesos.
Quienes atacaron a los uniformados fueron identificados tras tareas investigativas, y luego de allanamientos a cargo de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas – Unidad Especial Jaguar, y con el apoyo de un helicóptero, se pudo detenerlos desarticulando la banda conformada por Lucas “el Colo” Romero, argentino de 40 años, líder de la organización, y los paraguayos Alan Almada, de 27, y Carlos Waldir Avalos, de 38.
Bajo los cargos de tentativa de homicidio, portación ilegal de armas y tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, los delincuentes quedaron a disposición del fiscal Fernando Garate, de la Unidad Funcional de Instrucción 1 de Laferrere, quien lleva adelante la causa por la desaparición de las mujeres.
Si bien las víctimas eran clientas de los “transas” detenidos, por el momento nada los vincula con los crímenes, por lo que se siguen adelante con las investigaciones para dar con los homicidas.
