Ocurrió durante el último partido de la selección. La falta de patrullaje policial permite a los delincuentes hacerse con las calles y generar terror entre los vecinos.
La alarma vecinal fue determinante para que un caco volador escape por los techos de varias viviendas de la calle Conscripto Bernardi al 1900, en Villa Maipú, partido de San Martín.
Ágil como un gato, pero más limitado neuronalmente que un felino, se puso en riesgo por nada, para huir como cobarde por los techos cuando sonó la alarma vecinal. Se tiró de varios metros de alto, hacia la calle, por lo que le quedan 6 vidas.
Los vecinos viven con miedo ante la rapidez con la que se mueven los delincuentes, a cualquier hora del día, y en cualquier lugar. Entraderas, escruches, o ingresando a través de las azoteas, las modalidades son todas, mientras parece no haber acción preventiva eficaz para evitar los delitos.